Espacio laboral saludable

Dentro de los grandes cambios que afrontan las compañías hoy,  uno de los más significativos hace referencia a la importancia de transformarse en empresas saludables.  Se ha comprobado que el bienestar de los trabajadores aumenta la productividad. Por ello adquiere gran relevancia el espacio donde se desarrollan las actividades

En La Información de hoy podemos leer: "Un informe de la Red de empresas Mas humano destaca que las empresas que ponen el foco en las “personas” consiguen un impacto positivo y directo en sus resultados como un absentismo laboral del 2%, un equilibrio de la vida personal y profesional del 80%, una motivación de sus personas del 74% y un orgullo de pertenencia del 85%. Y eso repercute y mucho en la cuenta de resultados.

A partir de comprender la importancia de este tema, se han iniciado cambios en el ambiente físico de trabajo, donde especialistas del sector nos acercan datos muy importantes , en el mismo periódico podemos ver: El informe titulado Human Spaces destaca que en todo el mundo, porque este deseo ya es global, lo que más anhelan los empleados en su entorno de trabajo (no hablamos ahora de salarios) es luz natural (44%), plantas de interior (20%), ambiente tranquilo (19%), vistas al mar (17%) y colores llamativos (15%).  No son cuestiones baladí. Trabajadores en oficinas con elementos naturales tales como vegetación e iluminación natural son de media un 15% más creativos y un 6% más productivos. De hecho, las personas que no tenían ventanas con vistas pasaban menos horas a la semana en la oficina.
Hacer del espacio una porción de naturaleza a través de la luz natural, las plantas y las vistas. Lograr que los colores transmitan las sensaciones positivas y fundamentalmente que cada persona involucrada acompañe con su ilusión, entusiasmo y "buen rollo", para hacer del trabajo un lugar de bienestar

Hablemos de Certificación como Empresa Saludable

Lograr la certificación que avala el funcionamiento y la preocupación de los directivos de una empresa por ofrecer políticas saludables a sus trabajadores es muestra de calidad y de responsabilidad por el bienestar de quienes trabajan en ella.

La buena salud de la plantilla determina si estamos frente a una Empresa sana y saludable o por el contrario ha llegado el momento de generar cambios para el bien de todos.

 El bienestar general de los trabajadores, depende tanto de sus hábitos saludables,  o su salud emocional  como de  la prevención de la enfermedad y del ámbito físico donde desarrolla sus tareas.

La Red Europea para la Promoción de la salud en el trabajo determina que dicha promoción depende de los esfuerzos de los empresarios, de los trabajadores y la sociedad para mejorar la salud y el bienestar de las  personas en el lugar de trabajo.

En base a esta definición de 1997 nació la Declaración de Luxemburgo a la que adhieren 28 países, España entre ellos y gran cantidad de empresas.

El gobierno de España a través del Ministerio de Empleo y Seguridad Social ofrece la posibilidad de ser reconocido como empresa saludable.

Cualquier empresa u organización, con independencia de su tamaño, titularidad o sector, puede solicitar su adhesión y manifestar su compromiso con la Declaración de Luxemburgo y, si lo desea y cumple con los criterios de calidad elaborados por la ENWHP, pedir su reconocimiento como buena práctica en promoción de la salud en el trabajo.

Más allá de la Prevención de Riesgos Laborales, cada empresa que tome en cuenta la gestión de la salud integral de los trabajadores y su entorno familiar, como así también su solidaridad con la comunidad a la que pertenece, estará encaminada a obtener el reconocimiento como Empresa Saludable.

Desarrollar una Marca Empleadora es posible

¿Es nuestra empresa  altamente valorada por los trabajadores?

¿Existe una importante fracción del talento que quiere trabajar con nosotros?

¿Estamos enamorando a los talentosos en busca de empleo?

Cuando una empresa puede responder que sí a estas preguntas, significa claramente que su marca es empleadora, es decir que logrará atraer (ya que no retener) a los mejores y ellos no se querrán ir con la competencia.

Una marca empleadora exitosa no se construye mágicamente, es el producto de una estrategia de Employer Branding llevada adelante con convicción y energía, en la que se habrá invertido tiempo, esfuerzo y recursos.

El resultado es ampliamente positivo ya que está siendo cada vez más dificultoso resultar suficientemente atractivo para enamorar al talento y adaptarse a un mundo digitalizado.

Buena comunicación; Objetivos claros; Acciones motivadoras y especialmente poner al trabajador en el centro de la atención: Cuidar su salud favoreciendo hábitos saludables y atención emocional; preocuparse por su familia; desarrollar acciones solidarias hacen una marca empleadora.