-Quisiera aprender, ¿querrías enseñarme?
-No creo que sepas cómo hay que aprender- dijo el maestro
-¿Puedes enseñarme a aprender?
-¿Puedes tú aprender a dejarme que te enseñe?
El enseñar sólo es posible cuando también es posible aprender.
El maestro no es el que guía, si no el que ayuda a que te descubras tú mismo y descubras, desde ti, la realidad.
Anthony de Mello, La oración de la rana
Este hermoso cuento nos revela nuestra verdad como coaches, no podemos enseñar nada a nuestros pupilos, no somos técnicos en cada disciplina a la que ellos se dedican, no somos expertos en cada empresa a la que ellos pertenecen, tampoco somos maestros en el arte de vivir.
Ser coach es tener la fascinante tarea de acompañar a nuestros pupilos, a través de preguntas y de herramientas simples a descubrir su realidad, para transitar por ella y con ella hacia un futuro deseado.
Descubriendo la verdad de cada uno nos engrandecemos y podemos poner proa a nuestros sueños, transformarlos en objetivos y celebrar su logro.
Como expresara Albert Einstein:..."Aprendizaje es experiencia, todo lo demás es información"
El coach acompaña el camino por el cual va experimentando su pupilo, no le informa sobre cómo hacerlo
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